QUESADA GARCÍA, José

Hay un rincón de Roquetas desconocido por sus habitantes. Una casa, construida en el último cuarto del siglo XIX, y que está en el número 1 de la calle La Romanilla. Hoy se encuentra restaurada, pero su fachada conserva como era desde su construcción, aunque pintada con colores atractivos. Es, por lo tanto, un edificio de valor patrimonial roquetero, y con historia. En ella vivió D. JOSÉ QUESADA GARCÍA, el “JOVEN HÉROE DE CUBA”.

D. José Quesada García en 1899.

¿Quién fue D. JOSÉ QUESADA GARCÍA?

Para entender y comprender quién era este señor, recomiendo que se lea esta breve biografía, con los ojos del momento histórico que le tocó vivir y cuál era la situación, tanto social como política y religiosa de la Almería de los primeros años del siglo XX.

Comenzaré diciendo que fue el alcalde de Roquetas desde enero de 1912 hasta octubre de 1923.

La biografía de este señor ya la realizamos, de una manera más extensa, mi compañero Gabriel Cara González y yo, Ignacio Jiménez Carrasco, dedicándole un capítulo en nuestro libro “Roquetas de Mar, HISTORIA VIVA 1”, capítulo que se pudo realizar gracias a la generosa colaboración de Doña Trinidad Marín Quesada, nieta de D. José.

D. JOSÉ QUESADA GARCÍA, nació en Alfarnate en 1872, que en aquel año este pueblo pertenecía a la provincia de Granada, y hoy es de la provincia de Málaga. Sus padres fueron: D. José Quesada Escobar, oriundo de Berja, y Doña Francisca García Junco, de la zona del barrio de Las Salinas Viejas.

Su padre, fue de los primeros carabineros que tuvo el cuartel de Cerrillos. En este destino conoció a una joven del barrio de Las Salinas, con la que se casó. El matrimonio marchó a vivir a Alfarnate, porque D. José (padre) fue trasladado al cuartel de esa localidad.

Por eso D. JOSÉ QUESADA GARCÍA, así como sus hermanos Salvador y Francisco, fueron educados en un ambiente militar, y quemaron su juventud en una vida muy decorosa y brillante, pero muy agitada, con ideas y valores patrióticos, llegando a jugarse la vida por su patria, España.

Centrándonos en D. JOSÉ QUESADA GARCÍA, sabemos que se alistó como voluntario en el ejército en 1891, con tan solo 19 años, en el Regimiento de Infantería “Pavía”, en Cádiz.

En 1893 marchó con su Regimiento a defender la plaza de Melilla, sitiada por las tribus rebeldes marroquíes. Por su valor en esta batalla, en 1894, lo ascendieron a Sargento de Infantería. Y en 1895 le concedieron la Cruz Blanca del Mérito Militar por sus servicios heroicos prestados. Ese mismo año embarcó para Cuba y tomó parte de la defensa de la isla. En 1896 le concedieron dos condecoraciones, la Cruz de Plata del Mérito Militar y la Cruz de Plata con distintivo Rojo, por los méritos acreditados en defensa de Cuba. En 1897 es ascendido a 2º teniente. En 1898 le concedieron la Cruz de 1ª Clase del Mérito Militar con distintivo Rojo, por los méritos contraídos en distintos combates y gestas heroicas, salvando y ayudando a sus compañeros.

1899. Año importante en su vida, ya que fue repatriado a España y pasó a formar parte del Regimiento “Pavía” de Almería. Disfruta de un permiso como combatiente en Roquetas, donde fija su residencia porque aquí vivía su madre, ya viuda. Su padre falleció mientras él combatía en Cuba. A mediados de este año le concedieron la Cruz de Isabel la Católica. Y se ha dicho que 1899 fue muy importante en su vida porque, con 28 años y, llegado de Cuba conoció a una joven roquetera de 20 años, de la que se enamoró, casándose a los seis meses de conocerse. Esta joven era Doña Rogelia Pomares Velázquez, hija de D. Rogelio Pomares Sánchez (Maestro de Enseñanza Pública), y de Doña Isabel Velázquez Ruiz. El joven matrimonio fijó su residencia en esa casa que ilustra el encabezamiento de este artículo.

Haciendo un barrido en el tiempo que transcurre entre 1900 y 1912, año en el que accede a la alcaldía de Roquetas, los acontecimientos que más le sucedieron fueron:

D. José ya es alcalde
de Roquetas, y aparece junto a su esposa
Doña Rogelia y su hijo de 2 años José.

Que en 1902 nace su hija mayor Amelia.

1903, fue un año dispar en sus sentimientos. Primero, que es elegido para alcalde su suegro D. Rogelio Pomares Sánchez. También, que falleció su hermano mayor, Salvador, héroe de la Guerra de Cuba. Falleció víctima de una pulmonía que arrastraba desde su llegada de Cuba.

1904, nace su hija Dolores.

1905, es testigo del comienzo de las obras para la creación de las Salinas de Levante, que será un punto que mitigue la escasez de puestos de trabajo que sufre el pueblo.

1911. Su hermano menor, Francisco, decide emigrar a Orán con su esposa e hijos. Ya no volverían a España, algo que dejo a la familia sumida en la tristeza.

1912. Año en que es elegido alcalde de Roquetas, sustituyendo a su suegro en el cargo por enfermedad, y de la que fallecería ese mismo mes de febrero.

1913, nace su hijo José y en 1917 su hija menor Josefina.

Entre las actuaciones al frente de la alcaldía destacamos que:

Consiguió que las autoridades autorizaran el comienzo de la construcción de la carretera de Roquetas a Alicún. Obra que dio bastante trabajo y palió un poco las necesidades del pueblo. En 1914, autorizó la instalación de la fábrica de la luz “Nuestra Señora del Carmen”. En 1915 acude a socorrer a las familias de los pescadores que, por culpa de los temporales que se prolongaron durante dos meses, los hombres no pudieron salir a pescar y estaban pasando una situación extrema. El ayuntamiento, con su alcalde al frente, les facilitó alimentos y medicinas. En 1918 vivó la tragedia de la epidemia de gripe que asoló a todo el país, y que tantas muertes produjo en Roquetas. El alcalde Quesada acompañó, en más de una ocasión al médico titular, D. Pedro Sola, a visitar a los enfermos y acompañar a sus familias. Su salud, desde entonces, quedó dañada. En 1921 aprobó la solicitud presentada por Doña Concepción Acosta Díaz, propietaria de las Salinas Viejas, de unos terrenos colindantes al castillo de Santa Ana, para la construcción de un embarcadero junto a la playa del castillo, con el fin de darle una rápida salida a la exportación de la sal. Sirvió, también, para que los pescadores tuviesen un refugio para sus barcos. Este mismo se recibe la buena noticia de la concesión de la Estación Telegráfica. En 1923 se produjo la entrada del Directorio Militar presidido por D. Miguel Primo de Rivera, y por tal motivo, cesan todos los cargos públicos en España. Desde ese momento, D. José Quesada García, dejó de ser alcalde de Roquetas, siendo sustituido por D. Julián Giménez Gómez. En 1924 se trasladó con su familia a Almería, donde puso su residencia en la calle La Reina, porque lo contratan en la Junta de Obras del Puerto. En 1931 regresó la familia a Roquetas, porque lo destinan a trabajar, como pesador de las piedras, en la construcción del Puerto de Roquetas. En este año, ven en él la figura de un hombre cansado, a pesar de contar con 59 años. Pero D. José llevaba a su espalda toda una juventud degastada en combates, primero en Marruecos y más tarde en Cuba. Empieza a vivir años de fuertes cambios tanto en lo político como en lo social. En 1934 recibe un duro golpe con el fallecimiento de su esposa Doña Rogelia Pomares Velázquez. Pero, este hombre que fue “Héroe de Cuba”, se apagó para siempre en noviembre de 1936. Su fallecimiento está envuelto en muy distintas versiones, porque él había sido miembro de Falange y eso le trajo muchos quebraderos de cabeza y ser molestado y arrestado en más de una ocasión, lo que quizás derivara en su muerte.

D. José, en el balcón de su casa de la calle
Romanilla, con su nieta Trinidad. Año 1936.

Ignacio Jiménez Carrasco