Vélez Blanco: las máscaras y el carnaval

FIESTAS PROFANAS ACTUALES: LAS MÁSCARAS Y EL CARNAVAL

La festividad profana más característica de Vélez Blanco, de fama ancestral en la comarca y de renombrada tradición en todo el entorno almeriense, granadino y murciano (y, allende, por la emigración), es la de las Máscaras. Se trata de una costumbre muy arraigada en la villa y sorprende, a propios y extraños, por las fechas de su celebración: del 17 de enero al 3 de febrero, es decir de San Antón a San Blas, todos los jueves, sábados, domingos y festivos tienen lugar estas celebraciones. Su principal singularidad es la que se deriva de tratarse de máscaras, al estilo antiguo, siempre con la cara cubierta (“con la cara tapá”), con vestimentas inverosímiles, andrajosas o imposibles, pero genuinas y engarzadas con el pasado más remoto, al estilo quizá de los ritos de máscaras de los pueblos norteños en invierno, diferentes del estricto Carnaval, previo a la Cuaresma.

Si bien siempre se ha venido señalando que la extrañeza de las fechas de celebración de las Máscaras en Vélez Blanco se debía al hecho de esquivar las exigencias administrativas que prohibían, en el Franquismo, los Carnavales (pero, al final, acababan celebrándose), se ha podido documentar la existencia de un Privilegio inmemorial relativo a celebrar Máscaras públicas en la Villa los tres primeros días de Febrero, lo que ya evidencia la singularidad histórica de estas fiestas, su concreta fecha de celebración y su porqué, incluida su antigüedad remota. En idéntico sentido, también se ha podido documentar la existencia de una “costumbre inmemorial relativa a celebrar”, sin duda por ser cabeza del Señorío de los Fajardo, “las Fiestas Reales los tres primeros días de Febrero”.

El esplendor de la celebración de las Máscaras en Vélez ha sido tal que las casas principales de la villa tenían a bien celebrar bailes y recibir a las máscaras. Asimismo, también se organizaban comparsas, que musicaban temas locales sobresalientes a lo largo del año. De entre estas comparsas, destacaron las que organizaba el sacristán Pedro Arcas Díaz (Perucho) haciendo numerosas coplas que todavía se recuerdan. En la actualidad, las Máscaras tienen un notable éxito en sus dos facetas: las del estilo antiguo, con días exclusivos dedicados a su celebración (y al rito de “vestirse de máscara”, no de “disfrazarse”; de taparse la cara, en todo momento e impedir la identificación; y de decir: “Mascarica, mascarica ¿a qué no me conoces?” y otras expresiones y gritos de júbilo de estos días), y las dedicadas a la celebración de juntas de comparsas en el Teatro Municipal, en particular los días de la Candelaria y San Blas, o los más cercanos (en ocasiones, fiesta local), que nos aproximarían a parte de lo que en otros lugares, más adelante en el calendario, serán los Carnavales, aquí sí con vestimentas (“disfraces”) más elaborados o hermosos, pero con la cara descubierta.

Documento extraído de: Vélez Blanco, medio natural, historia y patrimonio cultural